Interesante propuesta que llega de Alemania, que de en tanto en tanto nos sorprende con sus producciones tanto en cine como en series.
Y en esta ocasión nos ubica en un futuro distopico con un gran avance tecnológico, dónde una empresa tiene la capacidad de realizar transferencia de años de vida, a quien este dispuesto a pagarlos, de quien este dispuesto a venderlos, obviamente mientras sean compatibles.


Y a eso se dedica su protagonista, Max, una especie de convencedor, promotor, que busca que personas con necesidades económicas donen esos años. Una especie de employee of the month corporativo.


A través de muy buenas secuencias, la película plantea estos clasicos tópicos del cine, desigualdad social, capitalismo maldito, la ética dudable de las grandes corporaciones. Temas que se tornan clichés, y más en el cine de ciencia ficción, incluso tratados en películas como Metropolis (Fritz Lang, 1927).
Pero la película, acierta y mucho, cuando filósofa sobre la vejez, de como nos afecta el paso del tiempo, sobre lo perdido e irrecuperable.
Un thriller de ciencia ficción, con buenas dosis de acción que mantiene la atención del espectador. Si bien no intenta ser profundamente reflexiva, se disfruta su visionado.

NOS ESTAMOS LEYENDO!

Deja un comentario

Este sitio utiliza Akismet para reducir el spam. Conoce cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Tendencias